domingo, 23 de abril de 2017

PAPÁ, MAMÁ... ¡DADME OTRA OPORTUNIDAD!

Buenas tardes, hoy quería hablaros de un tema bastante serio. En mis post anteriores siempre he ido dando algún adelanto o pistas, y creo que es la hora de tratar dicho tema extensamente.

Este misterio trata de las relaciones de padres, hijos y profesorado. Estaba yo tan tranquilo en la hora de la siesta navegando por facebook, y la curiosidad me llevó a un artículo de unas fotos de whatsapp muy duras que un padre había enviado a su hijo por haber suspendido latín. Siendo no algo extraño, mi curiosidad vuelve a llamar a la puerta y me pongo a leer los comentarios de las personas que aparecían en dicho artículo y me encontré con esto:

"Me dan ganas de copiarlo y envíarselo a mis hijos, una no quiere estudiar, el otro hace como que estudia, y lo cierto es que los padres no estaremos siempre, lo cierto es que nos decepcionan, que trabajamos duro y a veces no comemos, para que no les falte nada, estudios, ropas, comidas, salidas, caprichos, siempre damos nuestra esperanza, cariño y motivamos ,venga niños, estudiar si ese es vuestro trabajo... y ni aún así, por lo que no puedo decir que no esté de acuerdo con lo de ese padre". (He copiado el texto textualmente, modificando algunas faltas graves de ortografía, parece que si su función en el cole era trabajar como bien dice... ella mucho no trabajó).

Personalmente, no sé si esos mensajes/artículo serán falsos o una broma de mal gusto, ojalá que sí porque nadie merece recibir tales palabras y menos de un padre.

A menudo, asociamos que la función del alumno es estudiar, estudiar, estudiar y únicamente estudiar. ¿Hola? Os recuerdo que ante todo somos personas, somos humanos y un mal día o una mala temporada la podéis tener todos y cada uno de vosotros que estáis leyendo esto.

Aunque soy joven, solamente 18 años, en mi recorrido he percibido que la mayoría de padres recompensan a partir de una nota o un aprobado. Esto significa limitar, sí como lo lees, LIMITAR. Si apruebas todas.. te compro la play, te compro la moto, te apunto a fútbol, etc. Al final conseguimos que nuestro hijo vaya a por un aprobado (lo que necesita para recibir la recompensa) y se olvide de exprimir todo su potencial y habilidades.

Y os hago una pregunta, acaso el que no aprueba todas, y le ha quedado una asignatura ¿significa que no se ha esforzado lo suficiente? ¿Qué lo ha hecho mal?

Evidentemente no. Ya lo comenté anteriormente, el sistema educativo (y no culpo a los profesores, que al fin y al cabo cumplen con lo que les mandan) es un sistema relacionado con el azar. No importa los días y horas que hayas estudiado, los esquemas realizados, etc. Todo depende de 55 minutos, en los que el tema elegido por el profesor y su criterio para evaluarte dará el resultado de tu esfuerzo. Y lo tacho porque esto es falso, un examen es una hoja, y de esa hoja sólo saldrá una nota en la que ha influído los nervios y más cosas. He podido estudiar mucho y llevar el temario muy bien preparado y que no me salga el mejor examen de mi vida y suspenda. Vale, suspendo pero mi esfuerzo sigue estando. Y cuando vaya a ver la revisión del examen, no me digas "¿has estudiado poco verdad?" Porque sí, si he estudiado, me he esforzado y demás, sólo ha sido un mal examen.

Pero de todas formas, que triste, todas las horas que pasan con nosotros, conociendo incluso nuestros hobbys y que nos tengan que evaluar nuestros conocimientos en una hoja el último día. Dónde está esa evaluación inicial, mediante y final, que eso teóricamente muy bonito, pero luego el examen final vale un 90% dime tú dónde queda lo demás. Y si me voy al bando de los estándares, más de lo mismo, suponiendo que un examen final vale un 85% o 90% aproximadamente, ¿recoge ese examen los 200 estándares que tenga tu asignatura? ¿Realmente te demuestra si soy competente? ¿Realmente te demuestra los conocimientos que he adquirido? ¿Te demuestra mi evolución?
- Lo único que te demuestra es una nota, un enhorabuena o un esfuérzate más, sigue intentándolo.

A mi esto no me gusta nada...



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